La multiculturalidad en los planes de formación de idiomas corporativos: potenciando la comunicación intercultural
En un contexto de creciente movilidad geográfica en los entornos laborales, así como de constantes fusiones y adquisiciones constantes de empresas, los entornos multiculturales son una realidad cada vez más frecuente presente en las organizaciones. Una realidad de una sociedad multicultural que los planes de formación de idiomas corporativos no pueden ignorar.
La multiculturalidad en la formación de idiomas implica la consideración y adaptación de las diversas culturas presentes en una organización al diseñar programas de aprendizaje de idiomas. Estos planes están diseñados para permitir que las personas adquieran habilidades lingüísticas en idiomas distintos a los suyos, pero, sobre todo, a facilitar la comunicación intercultural efectiva y mejorar la convivencia en un entorno empresarial multicultural.
Para que los planes formativos en empresas multiculturales sean satisfactorios hay que tener en cuenta, como veremos a continuación, algunos factores diferenciales.
¿Cómo integrar un enfoque multicultural en los programas de formación de idiomas?
Diversidad lingüística
Un plan de formación de idiomas debe tener en cuenta el idioma de origen y la lengua materna de cada participante. Cuando las personas que forman un grupo tienen diversos orígenes lingüísticos, es importante anticipar las dificultades que pueden surgir al enfrentarse a un nuevo idioma dependiendo de su lengua materna. Como ejemplo, el aprendizaje del español no presenta la misma dificultad para una persona que habla una lengua romance que para alguien que no lo hace.
Integración de la diversidad cultural
La enseñanza de un idioma no se puede limitar a la enseñanza de su gramática y vocabulario, sino que también debe considerar el idioma como instrumento de expresión de una cultura, de una manera de ver el mundo y relacionarse con él.
Desde las primeras clases, en las que enseñamos a las personas a saludar y presentarse, es imprescindible conocer las diferencias culturales entre países. Lo que puede resultar cortés en un idioma, puede ser demasiado informal o incluso una falta de respeto en otro.
Sensibilidad cultural
En la gestión de equipos multiculturales, abordar la diferencia como una posibilidad de enriquecimiento tanto personal como para la organización, es la clave del éxito de este tipo de formación.
Un enfoque libre de prejuicios ayudará a comprender a la otra persona. Esto implica proporcionar información sobre las normas y valores culturales de diferentes países o regiones, así como las prácticas de comunicación y las costumbres empresariales.
Incluso aunque no lleguemos a dominar el idioma de la otra persona y lo hablemos cometiendo errores, solamente el esfuerzo realizado por aprenderlo habrá merecido la pena, pues demostrará el interés por conocer a la otra persona y su cultura.
Enfoque comunicativo
Los programas corporativos de idiomas deben centrarse en el desarrollo de habilidades de comunicación prácticas y relevantes para el entorno empresarial. Deben tener en cuenta no solo la precisión del mensaje sino su adecuación al contexto social y cultural.
Sirva de ejemplo que, durante muchos años, en la enseñanza del inglés se ha hecho mucho hincapié en la corrección gramatical, descuidando la pronunciación y la entonación e ignorando que una palabra mal pronunciada o una frase mal entonada pueden provocar serios malentendidos, cosa que raramente ocurre cuando se cometen errores gramaticales.
Algo parecido ocurre con la redacción de correos electrónicos. Está bien que nos preocupemos por las estructuras gramaticales y la cohesión del texto, pero igual de importante es facilitar la lectura a su receptor teniendo en cuenta aspectos clave de la redacción en distintos idiomas; por ejemplo, en español es muy frecuente el uso de la subordinación y las frases largas, mientras que en inglés son más habituales las frases cortas y sencillas.
En resumen, la multiculturalidad en los planes de formación de idiomas corporativos trata de reconocer y adaptarse a la diversidad cultural y lingüística presente en una organización, para promover una comunicación efectiva y una colaboración exitosa entre las personas empleadas.
Al abordar estos aspectos de manera integral, podemos garantizar que nuestros planes de formación de idiomas aprovechan los beneficios de la multiculturalidad, estando en sintonía con las necesidades y realidades de un entorno empresarial multicultural en constante evolución.
Para recibir asesoramiento sobre este aspecto particular u otros relativos a la formación corporativa de idiomas para tu empresa u organización