El absentismo puede arruinar tu plan de idiomas, 5 causas y claves para combatirlo
Según el informe de Adecco Group del último trimestre del año pasado, el absentismo laboral en España fue del 6,7%, lo que supuso un incremento del 0,1% respecto al año anterior.
Si analizamos las causas que provocan el absentismo, observamos que algunas de ellas son también aplicables a la falta de aprovechamiento de los cursos de idiomas. Veamos cuáles son estas causas y qué podemos hacer para que el nivel de absentismo sea el mínimo posible y no ponga en riesgo la formación.
¿Cuáles son las causas del absentismo en la formación de idiomas en la empresa?
Falta de claridad en los objetivos
Igual que la persona que ocupa un puesto de trabajo necesita saber cuál es su propósito, o qué impacto tienen las tareas que desempeña en el resto de la organización y en el servicio o producto final que su empresa vende, también los participantes en un plan de formación de idiomas deben conocer cuál es la meta que deben alcanzar.
Por este motivo, el primer paso para la puesta en marcha de un proyecto de formación de idiomas debe ser identificar las competencias lingüísticas que se requieren para desempeñar un determinado rol. Tras realizar un diagnóstico lingüístico, ya podemos definir el gap que existe entre el nivel requerido y el nivel real de la persona que ocupa ese puesto. A continuación, se diseña un plan de estudios adecuado al perfil y necesidades de esa persona con un objetivo medible y realista.
A lo largo del itinerario formativo, se realiza un seguimiento mediante el que se resuelven dudas, se realizan evaluaciones y se plantean indicadores que ayudan a monitorizar el avance del curso. Como resultado, se acuerdan con el alumno planes de acción y compromisos para corregir las desviaciones que puedan darse.
Falta de motivación
En la formación de idiomas, la falta de motivación es una de las razones más comunes por la que los alumnos dejan de asistir. Para ayudar a fidelizar tanto a alumnos como a profesores, es importante ofrecer una metodología flexible y personalizada con un plan de estudios adecuado a las necesidades específicas de cada participante y unas exigencias proporcionadas.
Al igual que el teletrabajo, también la formación virtual ha llegado para quedarse, y entre sus múltiples ventajas ofrece la posibilidad de cambiar de horarios cuando los participantes así lo requieran en cualquiera de sus distintas versiones: síncrona, asíncrona, individual, grupal en grupos cerrados o abiertos, ...
Por otro lado, es también habitual en los planes de formación de idiomas la sensación de “estancamiento”. Sobre todo, cuando los participantes alcanzan niveles intermedios.
En ocasiones este estancamiento no es real, pero basta con que el alumno así lo perciba para que se desmotive.
Evaluaciones periódicas que recojan evidencia de los puntos fuertes y débiles del alumno le harán ver de manera objetiva en qué destrezas se están produciendo avances y dónde debe seguir esforzándose. En este recorrido, es clave el acompañamiento del tutor para dar feedback al alumno y refuerzo positivo si se desanima.
Ambiente laboral y formativo desfavorable
La relación entre alumnos y profesores o tutores se basa en la motivación, el compromiso, la confianza y el respeto. Es imprescindible generar un entorno armonioso y participativo en el aula, de manera que las clases se disfruten en un ambiente agradable, seguro y proactivo en el que el alumno sea el centro y el profesor actúe como dinamizador, fomentando la participación de todos los asistentes, dando feedback de manera constructiva y siendo sensible a posibles inseguridades, bloqueos y prejuicios.
Los grupos de idiomas contribuyen muchas veces a afianzar los equipos de trabajo, al crear espacios de comunicación distintos de los habituales, más distendidos y donde necesariamente se abordan también temas personales además de los laborales, lo que ayuda a un mejor conocimiento de las circunstancias e intereses de los compañeros de trabajo.
Falta de control del plan formativo
¿Qué sucede cuando se pierde el control en la formación de idiomas en la empresa? Para que un plan de formación de idiomas funcione, tiene que estar integrado en la estrategia de la empresa. Si para la empresa es relevante la capacitación de sus trabajadores, estos deben percibirlo como parte de la cultura de la organización. El plan de formación deberá incluir en sus procesos mecanismos de control para supervisar que la formación se está llevando a cabo según los estándares y objetivos previstos, y contar con herramientas que permitan a las personas responsables tener acceso a toda la información correspondiente.
Definir desde el inicio unos KPIs y una hoja de ruta, con reuniones periódicas de seguimiento, son claves para conseguir la implicación de los participantes y sus responsables. Por el contrario, perder el control puede llevar a que los participantes perciban que su formación no es relevante para la organización y, por lo tanto, afectar a su motivación.
Baja por maternidad/paternidad o enfermedad
Existen situaciones personales que pueden implicar la interrupción tanto de la asistencia al puesto de trabajo como a la formación; y entre las más evidentes está la baja por maternidad/paternidad. En estos casos, así como en los de enfermedades no incapacitantes, la alumna o el alumno puede seguir asistiendo a clase si ésta se ofrece en formato virtual o, incluso si es presencial, si el proveedor cuenta con las herramientas para impartirla en formato híbrido, (bimodal o espejo, según la denominación de la FUNDAE). Por este motivo, es recomendable manejar planes flexibles que abren una gama de oportunidades para que el alumno o alumna no interrumpa el curso.
¿Qué ocurre si la formación se gestiona a través de la FUNDAE?
La FUNDAE permite que el trabajador que está de baja pueda seguir estudiando y que la formación siga siendo bonificable, si sus condiciones de salud no se lo impiden.
Los cinco factores que hemos expuesto en este post son los principales causantes de índices de absentismo elevados en planes formativos de idiomas en empresas.
En MondragonLingua ponemos los medios necesarios para contrarrestar o minimizar sus efectos, y los datos confirman su eficacia.
¿Quieres conocer un proyecto de formación de idiomas en el que MondragonLingua ha conseguido reducir de manera relevante los índices de absentismo?